No está mal el erasmus en París...La ciudad de las luces toda tan bohemio, tan artístico...Cierto, maravillosa iluminación diurna y nocturna la de esta ciudad, pero no vivo en un piso en el barrio latino, ni llevo boina; y mucho menos voy a gastarme 6 euros en una Moleskine pudiendo reutilizar las páginas poco aprovechadas de mi agenda.
París es caro; muy caro...Y eso convierte a un puñado de estudiantes de bellas artes, periodismo, sociología o psicología en auténticos equilibristas...Medimos al dedillo lo que gastamos buscando la oferta y la ganga, llegamos a coger el metro para hacer la compra con tal de ahorrarnos unos centimillos al hacer la compra y por supuesto...las terrazas y bares nos parecen algo prohibitivo.
Así vamos sobreviviendo: nos vamos de picnic con un vinito a lo bohème, pero no nos gastamos más de 3 euros por botella como manda la picaresca española, practicamos el postureo de sentarnos en parques a echar la tarde y hacer fotos porque además de artístico, es gratis. también hacemos fotos a cada marca barata que compramos y nos gusta (o al menos no nos mata) para apuntarlo e ir además de a lo barato, a lo seguro.
Yo soy de las que apunta cada gasto que hace (al menos lo intento) y guardo todos y cada uno de los céntimos para pedir el café en la facultad, como cuando eras pequeño y te comprabas las chuches con las moneditas de 1 peseta que encontrabas por casa, pues igual, pero con euros.
No pasamos hambre, sólo penurias a la hora de hacer la compra; pero tranquilos, estoy bien, aún me queda jamón serrano envasado al vacío y además somos tan tan modernos y tan tan creativos que en París vivimos del aire que respiramos y del arte de sus calles, y de lo que nos llega desde España, porque la bohème parisina no se concibe sin la picaresca española.
Foto de Carmin Alizarina
Se les quiere
_cfw_