lunes, 14 de julio de 2014

Un escalofrío

Sacar la ropa de verano tiene sus consecuencias. 

Entre bolsas de ropa,cajas de cartas y recuerdos, ahí estaba tu caja, y tuve que apartarla; simplemente la ví y recordé que ahí estaba tu caja, esa en la que metí mi-tu-nuestra historia

A veces, apareces.

He conseguido que nuestras canciones ya sólo sean mías y que aquel corto ya no sea nuestro. Pero es inevitable, de repente, cuando vienes a mi mente lo inundas todo, y vienes así, sin avisar. Tu recuerdo me paraliza el cuerpo, y en menos de un segundo, consigues electrizarme como jamás lo conseguiste con un beso, salvo esos del aeropuerto.Cuando me acuerdo de ti, pasa esto. 

En ese efímero instante que te dedico, no siento rencor, ni pena, ni siquiera nostalgia; lo único que siento es un alivio inmenso cuando se pasa. Cuando mi cabeza decide difuminar ese maravilloso momento que compartimos, ese estallido eléctrico se pasa porque suspiro aliviada y, ya pasó. 

Pero no me molesta sentirte así, como un escalofrío; me gusta el alivio que siento cuando termina el recuerdo, cuando intento analizar lo que he sentido, y me doy cuenta de que sólo eres eso, un escalofrío. Me descolocas un instante para marcharte al segundo y dejarme relajada, con un ligero suspiro. 

Como llegas, te marchas; y por poco que te piense, lo que más me alivia es dejar de pensarte.


_Se les quiere_

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